Crónica Noviembre: elecciones vecinales (10/11/2012)

A raíz de que la directiva debe renovarse este próximo año, se hace necesario tocar el tema de las elecciones vecinales. Sabido es que hace poco hubo una elección de concejales y alcalde en todo Chile y que los candidatos que se presentan , casi en su mayoría se autoproclaman, o sea, ellos mismos indican tener las cualidades que buscamos en alguien que nos represente o bien son designados por los partidos políticos, por grupos de "independientes" o un cuantohay de razones subjetivas.
En nuestro barrio ocurre algo muy distinto, no está presente ninguna instancia partidista o gremialista y los candidatos no se autoeligen como tales, son los vecinos y socios quienes indican que tal o cual persona tiene la capacidad para poder ser del directorio, máxime si hoy por hoy se ha visto un trabajo serio, responsable y trasparente, basado en el apoyo de sus pares.

En este sentido, varios socios han sido nuevamente elegidos por los vecinos para que se presenten como candidatos en donde se espera puedan participar cumpliendo los requisitos que señala la ley y el Estatuto; a ellos se les ha visto experticia, valores y encarnan vecinos excelentes de aquellos que son probos y dispuestos a seguir la senda de mejorar al barrio sin aprovecharse de él.
La capacidad de un dirigente se mide por su trabajo, obra y dedicación, generalmente el que promete mucho cuando no cumple es criticado con razón, por ello el plan anual de trabajo adquiere una importancia crucial, como que el dirigente esté motivado y sepa que este es un trabajo no remunerado de 24 horas diarias. Deberá considerar también que hay que estar en todos y cada uno de los problemas que se presenten dentro de la competencia del cargo y para ello hay que poner todo de nuestra parte para salvar los escollos que se presentan y no estar pensando que esto tiene horarios, que todo hay que pedirlo a las autoridades, que me deben remunerar de algún modo y especialmente que esto no es un trampolín para realizar una actividad política.
  En muchos barrios los dirigentes vecinales no hacen bien su trabajo, indican que no tienen apoyo y se acoplan a otras instancias para realizar una supuesta buena labor. Nosotros pudimos escudarnos en lo mismo: que nadie paga cuotas, que no nos apoya alguna institución pública, que estamos cansados; sin embargo en tres años y medio hemos logrado conquistar a los vecinos que nos dicen que somos la primera junta de vecinos en Calama con 175 casas que pagan cuotas (aunque algunas están atrasadas), que tenemos página en Internet y que casi todo lo hacemos en computación (otro logro es contar con carné de socios que da descuentos en comercios asociados) y haber creado un sistema de apoyo a la comunidad concreto.
Esperamos que en las próximas elecciones los candidatos llenen las espectativas, ha quedado la vara alta y ya que no se pueden postular nuevamente algunos miembros del directorio es de esperar que entre todos sigamos en la senda de mejorar a Villa Los Pimientos.
Es preciso indicar que no se hubiera podido unir al barrio, organizarlo y realizar toda esta labor sin una cabeza clara y lúcida, encarnada por Juan Villafaña nuestro presidente. Gracias a él y a su familia (que ha dado mucho para el barrio) se han desarrollado las diversas actividades (llevando y trayendo a los vecinos sin cobrar un peso en gasolina, ha dado tintas, tóner, hojas, su tiempo aún ha pesar de graves problemas de salud en su familia) y especialmente a tenido el conocimiento preciso para llevar a Villa Los Pimientos a ser un barrio más afable y donde cada uno ocupa el lugar que le corresponde y es de esperar que quienes sigan en la directiva, ya que él no se presentará nuevamente, tomen la misma actitud trazada y hagan del directorio y barrio un lugar de excelencia.